Yo podría haber sido muchas cosas:
bailarina, pintora, pianista
o astronauta.
Pero nunca supe pintar lo que mi mente inventaba y las melodías que hay en mí
no encuentran
compás ahí afuera.
Las estrellas me gusta verlas en los ojos de quien me vive y me da vida. No allí arriba, paseando por el universo.
Yo podría haber sido lo que toda madre quiere
o haber
elegido el camino del triunfo.
Podría… pero decidí ser letras porque ellas
nunca acaban, pertenecen a quien sabe leerlas, a quienes las sueñan y con
ellas inventan.
Decidí ser letras porque en el cuerpo tengo escrito el destino
y en los ojos llevo los versos por los que algún día volverás.
Yo podría haber sido arquitecta, científica, podría haber
inventado la cura de alguna enfermedad horrorosa y así dormir tranquila cada noche.
Pero la única casa que sé construir
son las palabras, no tengo el don de aquellos que curan los cuerpos de los demás y mis noches se han hecho para escribir historias que a veces tienen dueño.
Pese a ello creo en las palabras, que como algodones curan almas.
Decidí ser letras para escribirme
una y otra vez cuando me olvide.
Soy letras porque la libertad son siete de ellas
y solo a ellas pertenezco.
Nací letras porque la única guerra que se debe permitir es la de las palabras y
solo con ellas combato.
Yo podría haber elegido cualquier otro camino
y al final del
día volvería a donde pertenezco,
a todas las letras que sin querer me circulan
por el cuerpo.
Menos mal que elegiste ser letras :) tu forma de escribir es mágica!
ResponderEliminarTus letras dan placer al leerlas. Todo un gusto tropezar por aquí. Voy a ver si me quedo un rato...
ResponderEliminarNo hay nada de malo en ser letras. Ahora quizás es el momento que la sociedad empieza a entenderlas, tienes razón en que las madres siempre quieren que seamos más de lo que a veces, podemos ser o de lo que nos gusta realmente.
ResponderEliminarMe ha gustado el trozo de "soy letras para escribirme si alguna vez me olvido de quien soy..." ;)